esquirlas

Te mostré mi mano y con ella los 80 dedos con que tocaba un piano de teclas rojas. Tú, amputaste piadosamente, mis 5 mejores dedos, para guardarlos en formol y mirarlos fijamente desde la mesa de la cocina, mientras saboreabas tu café con leche y 5 cucharadas de azúcar, una por cada uno de mis dedos. Mi venganza, fué señalarte desde el frasco y con el resto de mis 75 dedos tocar una marcha fúnebre todas las noches de tu vida. No pudiste dormir, ni cerrar los ojos y el sueño, el tuyo y el mio, arrastraba nuestros cuerpos, como hologramas, sobre muros de cemento, flacidez sobre rigidez....Esquirlas de mi piel cerca de tí, oliendo la traición, sabiendo que la belleza efímera o circunstancial destruiria la tortura.

La catifa riallera

Foto: Turmix fotografia 

Un matí qualsevol, dues amigues s'assegueren plegades vora el foc i mirant-se als ulls van riure i mentre reien cosien, i mentre cosien, cantaven, i mentre cantaven, negociaven, mentre negociaven amb el destí els èxits i fortunes que la vida els portaria, somniaven, i mentre somniaven el timbre els despertà a la realitat, obriren la porta, i la realitat no els va agradar, així que es tornaren a mirar els ulls i seguiren cosint, una cosia cap a l'esquerra i l'altre cap a la dreta i tot i així sempre reien, s'entenien i trobaven la manera de cosir juntes. Gràcies Ester!! 

coll

.... on els nusos de les llàgrimes fan més mal....

Cladi

el objeto

Ingredientes secretos componen la melodía del menú del desamor. Tizas blancas para condimentar la ensalada,  piedras redondas y castañas para el estofado oloroso de otoño, flores secas para untar en el pan seco …. Recetas que solo pretenden conquistar mi propio corazón, con el deseo de llegar al jugoso hemiciclo que da vueltas sobre sí mismo  y  rompo a carcajadas, mientras entre los dedos de mis pies sujeto el objeto; el objeto ardiendo que me abrasa  y me hace llorar, un llanto eterno que acabó  ayer o seguirá andando sobre cristales. Con las palmas de mis manos sangrando, dibujo sobre la nieve un astuto abandono, recientemente adoptado.

Huérfana y vagabunda, busco un retal tejido sin trama, para coserme un vestido de florecillas minúsculas y  me acurruco entre los pétalos de una de ellas y allí, vuelvo a nacer y de mi vagina emana olor a jazmín, mis ojos color de lavanda, mis lágrimas son pétalos de gardenia, mis dedos de girasol y mi boca …………….. así toda realidad es imposible y todo lo invisible se hace palpable, aunque  no logro entender de donde caen los besos que se posan en mi hombro y resbalan dulcemente hasta mis nalgas, pero recojo cada beso y a sorbos disfruto unos, los otro, los extiendo en el jardín de florecillas de mi vestido y me revuelco en ellos, hasta  que me arañan la piel. Y así se acaban los besos y ahora, espero los abrazos. Cuando lloverán? De repente encuentro el primero de mil abrazos, entre las páginas de un libro prestado. Me los puedo quedar? Los puedo abrazar? O quizás quieren que los bese? Voy a construir un palacio de briznas de paja, para que vivan conmigo y me acompañen en las noches sin estrellas de mar, sin búhos, ni cactus, ni mariposas que revolotean en las profundidades de mi misma, sobrevolando el trigo subacuático, repleto de frutos azules.  

Con mi barita mágica consigo abrir la puerta, que deja entrar un haz de luz cegadora, una luz líquida que me deslumbra e inunda mis ojos de la viscosidad del pasado, con recuerdos de avellanos repletos de pendientes y otros recuerdos que me transportan a un mundo abisal. La luna, sonriéndome, me canta una nana que me adormece y sonámbula me tambaleo y bailo, bailo al son de la melodía del menú del desamor…

exposición en Barcelona

Con mi ilusión de niña de 6 años y la madurez de una mujer de unos cuantos más, me expongo desnuda en una galeria de Barcelona, donde muestro cada herida, que intento curar lamiendome suavemente, procurando no emitir ningún alarido de rencor. Mi toraz, hecho de trozos, recortes, sobras, recuerdos, momentos.... Una guitarra, poniendo sonidos graves y agudos, notas de colores vivos. Unas alas, que me contruyo ligeras, para ser capaz de sostener la libertad que me otorgan. En el alma, una mancha rojo intenso, que se hunde hasta la profundidad del infinito. Una columna invisible hecha de palabras, sostiene esta estructura, molecularmente fràgil, que vibra al tacto sutíl del dedo corazón, recorriendo muy lento un sendero púrpura, desde la frente hasta las entrañas, donde nace todo aquello entrañable...
Gracias a los que observan mi cuerpo y ven en cada costura una historia por contar o un secreto que no desveleré jamás....

Catifa voladora

sobre aquesta catifa, no hi vola Aladí, sino els meus somnis, que aterren amb suavitat enmig d'un gran bosc. A cada arbre hi ha una petita porta vermella, amb un nom que no puc llegir fins que trobo les meves ulleres i llavors sí! una imatge nítida sobre cada nom em permet reconèixer la porta que s'obre a ........ Així que era aquí on viuen! Per fi els he trobat. A les meves mans tinc 19 claus rovellades, m'acosto a la primera porta, que s'obre dolçament. Dins de cada arbre descobreixo el que s'hi amaga i és tan extraordinàri, que m'hi vull quedar a viure....